Delirios de grandeza es lo que me hace empezar a correr sin ningún sentido
Delirios de poder hacer de todo
Delirios tirado en una acera donde puedo ver las estrellas
Delirios de grandeza tras las ventanas tintadas de mi cabeza
Delirios de lujuria tras las faldas que persigue mi mirada
Delirios de pereza cuando no quiero salir de esas sabanas
Delirios de gula cuando te comería entera
Delirios es lo que llaman a mi locura comercia
A esa locura que todos quieren ver sin mas
Para pensar que ellos son normales
Que nunca enloquecerán
Que simplemente es un estigma de la sociedad
Cada mil uno a de salir mal
Delirios de locura es lo que me llaman cada mañana al pasar
No quieren reconocer que esto esta mal hecho
Que la luna no es quien controla las mareas
Delirios de grandeza tras la cara oculta de ella
Mi locura comercia, se compra a través de unas frases bonitas adornadas
Mi locura comercial, no es sana
Vuestra locura llamada San Valenti o Navidad es mas normal
Vayamos a alabar a algo que nos de dinero, no busquemos en los demás
Delirios de grandeza?
JA claro que no me sentiré inferior a vosotros
Locura comercial? que va, no la compre, me la forje poco a poco como a mi me gusta
Locura? si por muchas cosas pero ningún delirio en ella.
21 castillos de arena
Y Pequeño Peter Pan Con Su Puta Locura
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siento que... hacen falta muchos más delirios para poder definir el verdadero y gran delirio que convoca y los es todos
ResponderEliminarme gusta este blog... eres otra persona que habla de locuras...
no sé... es una alivio encontrar gente que piensa tan vertiginosamente como (quizás) yo
beso =)
¿No te parece bonito que la luna controle las mareas y a nosotros?
ResponderEliminarUn saludo!
Oye, ya que me he pasado por aquí, decirte que he hecho un nuevo blog, pero no es de escritos, es de citas literarias.
ResponderEliminarSé que no te va mucho el rollo, pero si te quieres pasar ya lo sabes :D
Un saludo.
Ya...,llego algo tarde, pero al fin he conseguido colarme en tu blog.
ResponderEliminarMe gusta cómo escribes porque es como si disparases cada uno de tus pensamientos (rápidos y extraños) al papel, sin importar cómo queden o quién los escuche. Y eso es lo que los hace puros.